En nuestro país, son las empresas corporativas las que principalmente contratan algún tipo de investigación mientras que las pequeñas y medianas aún los ven como un lujo. Saberlo resulta preocupante, ya que al carecer de los mismos es muy difícil estructurar adecuadamente una estrategia de mercadotecnia que ayude a impulsar las marcas. Por otra parte, hay cada vez más sectores que se han dado cuenta de que más que un gasto innecesario es una inversión clave que ayuda a minimizar el riesgo a partir de un conocimiento más claro de los diferentes agentes que intervienen.
Según datos oficiales de Inegi el 99.8% de las unidades empresariales son Pymes por lo que hay un gran número de empresas que se inician apenas en este mundo. Para las mismas presentamos a continuación una guía breve de los puntos a considerar para que reciban lo que necesitan:
1.- Lo más importante es el diseño de la investigación
Una vez seleccionada la agencia tienes que sentarte con ellos para aterrizar los objetivos y que los expertos te ayuden a definir una metodología a la medida.
2.- Tener mucha información resulta poco útil
Hay un fenómeno llamado “parálisis por análisis” el cual consiste en que contar con demasiada data lejos de ayudar, entorpece. Presentaciones de resultados demasiado extensas provocan que se pierda el foco en los objetivos iniciales de la investigación y que el decisor interprete como importante aquellas variables clasificadas como “Nice to know”.
3.- Exige ser partícipe del proceso
Esto no quiere decir que tú trabajes por ellos, pero sí que los capacites acerca de las particularidades de tu industria. Ellos pueden ser estrategas expertos, pero nadie como tú para transmitirles la identidad de tu marca.
4.- El tamaño sí importa
Para que el estudio sea confiable debe tener una representación adecuada de tu población objetivo.
5.- Las estadísticas pueden ser engañosas
Hay varias lecturas que se le pueden dar a las estadísticas.
6.- Las grandes marcas no siempre marcan diferencia
Haz un cliente, no una venta.
Finalmente, es importante mencionar que, aunque los estudios nos permiten conocer las tendencias generales del mercado no son una bola de cristal. Los puntos antes mencionados te ayudarán a minimizar mucho más el riesgo; sin embargo, éste no se desvanece en su totalidad. El talento en los negocios sería irrelevante si ya tuviéramos todas las respuestas.